jueves, 26 de junio de 2008

El dar por culo

Desde que mundo es mundo y los abujeros son abujeros o agujeros o bujeros o gujeros el ser humano ha mostrado una pasmosa habilidad en el arte de dar por culo. Esto es, en el arte de joder al prójimo. Y aquí el tema de la homosexualidad no tiene que ver nada, aunque si queréis otro día debatimos sobre porqué dar por culo tiene una connotación tan negativa si hay gente a la que le gusta tanto dar como recibir… ¿se referirá a los casos en los que no te gusta?

Céntrate Geyper. Lo de dar eso es. Pues si. Los animalitos se dan en épocas de mucha necesidad, los Griegos también se daban y con mayor profusión una vez Platón hizo pública su teoría del amor platónico, luego llegó la época de las vacas flacas y la clandestinidad. Una época que por cierto se ha vivido durante demasiados siglos.

Y ahora que, por fin ha llegado la moda del escaparatismo de los armarios minimal y la educación de la ciudadanía (nótese que no dice “para la”), va y nos azota una crisis económica que nos deja tiesos como los pies de cristo, y pensaréis esto que tiene que ver. Pues tiene, tiene que ver, porque la crisis ha hecho que las empresas se sumen a la moda del “dar por culo”. ¿Que cómo?. Os pondré un caso practico que a mi hoy me ha hecho agrandar el ojete un par de centímetros de diámetro.

Érase una vez una empresa familiar que amasaba mucho dinero a costa de explotar a los trabajadores. Estas pobres víctimas tenían un heroe de blandiblu que hacía ver las protegia. El heroe de blandiblu era un espia del dueño de la empresa que además había cultivado su amistad con él durante muchos años y se dedicaba a hacer un extraño paripé convenciendo a los esclavos de que sus condiciones laborales eran las mejores que podían obtener.

Las pobres víctimas se confiaban en manos de su particular héroe con la esperanza de que algún día las cosas cambiaran. Pero blandiblú no tenía escrúpulos y cada vez que negociaba las normas que regían la situación laboral de los pobres esclavos, este vendía su alma al diablo a cambio de la juventud eterna (entiéndase algo parecido a lo que le ha ocurrido con el Berlusconi… que usa el dinero para hacerse la cirujía).

Un día llegó un nuevo chulo al gallinero, un chulo francés para ser exactos, y compró la empresa entera y a todas las gallinas. Era un chulo internacional, con mucho dinero y una organización bien montada. Además tenía un amplio sentido del honor y por eso quería que todas las gallinas del corral trabajaran en buenas condiciones: con sus calentadores de huevos, su yakusi, su masajista de alas, su comedero automático….

Antes de abandonar la casa, la familia explotadora se aseguró de dejar al principe blandiblú y a unos cuantos secuaces que garantizaran que los trabajadores continuarían siendo esclavos. Así cuando yegó el momento de negociar un nuevo convenio el principe blandiblú, representante de los esclavos, y los secuaces de la familia explotadora se reunieron en secreto sin decir nada a nadie, sin dejar participar a los esclavos… porque eso eran esclavos; y si algún momento habían tenido la pretensión de ser gallinas estaban muy equivocados.

Todo esto pasó en algún lugar de Catalunya entre enero y abril. En mayo entregaron la propuesta formal al Ministerio de Trabajo y ayer 25 de Junio entraba en vigor nuestro nuevo convenio después de ser publicado en el BOE. Nos han dado bien por culo amigos y lo peor de todo es que nadie nos ha preguntado. DE ESTA ME SÍNDICO!
MEGACONLAPUTAMADREQUEPARIOALOSDESGRACIAOSDEMICOMITEQUESONUNOS
VENDIOSDEMIERDA

L.

1 comentario:

vili dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
 
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